4/23/2015

Blight: Capitulo 37

Holaaa! Quería avisaros de que este capítulo es algo (bastante) más largo de lo normal, así que he decidido dividirlo en dos subcapítulos.  La verdad es que tenía muchas ganas de subirlo, pero no sabía como porque si lo dejaba a la mitad no me parecía bien pero si lo acababa igual lo hacia muy largo, así que opté por dividirlo. Ahora es como si fuesen dos capítulos pero subidos de una vez, para que me entendáis (por que hago unos líos...) Espero que lo disfrutéis, y gracias por leer. Besos!


Parte 1

Los dos nos giramos para mirar de donde procedía aquel estruendo. Jade, rápida y ágil escaló un par de ramas más antes de que se quedase literalmente con la boca abierta.
-¿Qué ocurre?-Pregunté, porque yo no podía ver nada.
Intenté ponerme en pie en la estrecha y quebradiza rama del árbol.
-¡No, no, no! ¡Quédate ahí!-Gritaba Jade, después de reaccionar. Saltaba prácticamente de rama en rama, otra vez, pero esta vez bajando. -¡Agárrate a algo!
Sin pensármelo me agarre fuertemente al tronco del árbol.
-¿Pero qué...?
No hizo falta que la chica me respondiese. Lo podía ver con mis propios ojos. Una gran masa de agua avanzaba rápidamente hacia nosotros, destruyendo casi todo lo que se encontraba por el camino. Mi cabeza solo logró reunir dos ideas: La primera era la muerte. La segunda era escapar. Sí, por ese orden.
En apenas un par de segundos el agua impactó contra nuestro árbol, el cual se tambaleó un poco, pero aguantó en pie. Jade soltó una carcajada de victoria, hasta que el árbol volvió a tambalearse. Esta vez mucho más fuerte. Tan fuerte, que el árbol no aguanto y cayó. Yo no tenía la fuerza suficiente para agarrarme al tronco que caía, chocándose con más árboles, por lo que me solté y caí mientras agitaba los brazos en el aire. Oí el grito de Jade también. La chica estaba aún más alto que yo, pero ella sabía como salvar la vida al contrario de mí.
No quería caer en el agua rápida y turbulenta. No sabía nadar, y estaba seguro de que esas no eran buenas condiciones para aprender. Pero no caí en el agua. Mi estómago chocó contra otra rama, o un tronco caído, que estaba a unos cinco metros del agua. El agua pasaba rápido bajo mi cuerpo, y notaba como la rama, el árbol, o lo que fuese que me había salvado de morir ahogado, se hundía.
Algo cayó a una precipitada velocidad hacia donde yo estaba. Jade. Su cuerpo no impactó como el mío en el tronco, pero se supo agarrar al tronco con sus brazos. Su cuerpo estaba colgando. La tenía a unos dos metros de donde yo estaba.
Estiré un brazo, porque temía moverme mucho y que el árbol se hundiese. Ella estiró su otro brazo y los dos nos cogimos de la mano.
-¡Sueltate!-La grité. Y al principio pensé que no me iba a hacer caso, pero se soltó. La sujeté fuerte, y le di la otra mano. El peso de su cuerpo hacía que el mío se deslizase hacia delante.  Otro árbol cayó justo donde Jade había estado hace diez segundos antes. Todo se desmoronaba y nosotros solo intentábamos caer.
Jade no pesaba mucho, pero tiraba de mi hacia delante. Estábamos mirándonos a los ojos, y sabía que los dos pensábamos lo mismo. ¿Iba a acabar así para nosotros?
-¡Tenemos que luchar Jade!-La dije.-¡Esto no puede acabar así!
Ella me clavó sus uñas en la piel, y yo hice un esfuerzo por no quejarme. Me apretaba las manos con fuerza, pero ambos las teníamos mojadas y ella se me resbalaba de los dedos. Intenté subirla un poco, pero no tenía fuerza, y el tronco crujió. Otro árbol cayó justo a nuestro lado, salpicándonos con el agua que seguía moviéndose rápidamente. La lluvia incesante no ayudaba, ya que me hacia ver peor.
Jade miró hacia abajo, luego me miró y se mordió el labio.
-Suéltame...
-¿Qué?-Pregunté confuso.-¡Ni lo sueñes! ¡No!
-Blight, apuesto lo que sea a que no sabes nadar. Y... esto no va a aguantar mucho más. Suéltame. Saldré a la superficie y luego nos encontraremos.
-Pero y si...
No quería soltarla. No por el hecho de que no confiase en ella y me estuviese mintiendo, si no porque no quería quedarme solo en esta situación. ¿Cuándo pasaría el agua? ¿Cómo saldría de allí?
-Blight por favor...
Ella me miraba suplicante, aunque en realidad tenía miedo. Lo podía leer en sus ojos.
Entonces la solté. No porque yo quisiese, si no porque no podía más con su peso y se me había resbalado de las manos. La vi hundirse. Esperé. Esperé. Esperé. Y apareció en la superficie de nuevo. Dio unos manotazos y volvió a hundirse, mientras la corriente la arrastraba.

No sé cuanto tiempo pasó hasta que el agua se calmó y rebajó de nivel poco a poco. Yo estaba temblando sobre el tronco, que cada vez crujía más. Temblaba por el frío, por el miedo... No quería bajar porque temía que el agua volviese, que me encontrase con el otro tributo, que me pasase algo en general...
Finalmente bajé. Tenía que encontrar a Jade, ya que ella había sido valiente al decirme que la soltase, y si ella me encontrase en el árbol igual que antes, estaba seguro de que no se lo tomaría muy bien.
Seguí el rastro del agua. Hacia el sur.
El agua volvía a estar por la altura de las rodillas otra vez. Costaba andar, sobre todo ahora que el suelo estaba revuelto, y a cada paso que dabas te hundías en el lodo.
Encontré a Jade gracias a que su pelo rubio destacaba entre el bosque. Estaba agarrada a un árbol, medio tumbada medio apoyada, con la mitad del cuerpo sumergido. Intenté correr hacia ella. Cuando llegué, me esperaba una sonrisa de bienvenida o algo por el estilo. Pero la cara de Jade borraba todo rastro de alegría. Estaba pálida, con los labios amoratados. Me enseñó una mano que estaba llena de sangre. Mi corazón empezó a palpitar fuertemente. ¿Qué la había pasado? No veía ninguna herida. Hice que ella pasase un brazo por mis hombros y se apoyase en mí. La levante un poco y ella se quejó con un grito desgarrador, pero lo vi. Había una especie de rama afilada atravesándola la cadera izquierda. Si salía de esta, no creo que pudiese tener hijos. Si salía de esta...
Me senté en el suelo, sumergiéndome en el agua, y senté a Jade en mi regazo.
-¿Me voy a morir verdad?-Preguntó ella con lágrimas en los ojos. No supe que responderla.
-No... Puedes ponerte bien. Solo quedamos tres.
-Blight, no me valen las mentiras ahora. Sé sincero conmigo. ¿Cuántas posibilidades hay de que gane?
-No lo sé, no soy médico...
-¡Blight, por favor!
-Quizá... si yo logro deshacerme del otro tributo y luego me matas sin que me de cuenta...
Entonces empezó a llorar. Yo la abracé fuerte, y ella me respondió al abrazo.
-Tengo miedo Blight. Tengo mucho miedo.
-Yo también...
-Tu no vas a morir...
-Eso no lo sé todavía.
-No vas a morir aquí. Yo lo sé. Estoy segura de ello. Morirás dentro de muchos años por un despiste o una tontería de esas que le pasan a la gente tonta como tú, pero no hoy, no aquí.
Cuando acabó de decir esto se separó de mi y vomitó. Apostaría cualquier cosa a que me puse tan pálido como ella cuando vi que solo vomitaba sangre. Se dejó caer en mis brazos de nuevo y apoyo su cabeza en mi pecho.
-Te dije... que estaba muy mal...
-¿No te duele?-Pregunté.
-¿El qué?
-Eso... atravesándote... ¿No te...?
-No lo siento Blight... es como si tuviese la mitad del cuerpo muerta...-Ella suspiró.-Hazme un favor...-Jade rebuscó en su pantalón sin ganas, sacó un cuchillo y me lo dio.-Mátame.
Mi cara se descompuso.
-¿Qué?
-Estoy torturándome sobre lo que va a pasar con la muerte, y lo asustada que estoy y... estoy cansada de pensar... Solo... haz que me olvide de eso y acaba conmigo.
-No puedo Jade...
-Te lo estoy suplicando...
-No puedo matar a otra persona.
-No me estas asesinando tu. Es un suicidio por mi parte pero que no soy capaz de hacer.
Ella, con sus manos temblorosas llevo mi mano hacia su cuello, y puso la fría hoja afilada en su piel. Hizo que me acercase a ella tanto que nuestros alientos se mezclaban.
No podía hacer lo que me pedía. Quizá nuestra relación había sido muy rara, y puede que a veces esa chica me diese dolores de cabeza, pero no podía hacerlo. Ella y yo eramos aliados. Y los aliados que uno hace en los Juegos se vuelven tus mejores amigos sin que te des cuenta, para siempre. Y la peor parte es que esos mejores amigos acaban muertos. Pero acaban muertos por su cuenta, no porque yo tenga que matarlos.
-Jade... de verdad que no puedo.
-¿Vas a dejar sufriéndome durante horas hasta que suene mi cañón? Cuanto antes lo hagas, antes saldrás de aquí, y lo sabes. Yo ya no pinto nada aquí... Y Rosie... estoy segura de que quiere volver a verte...
No le había hablado de Rosie detalladamente a Jade. De hecho no creí haberla dicho su nombre. Pero entonces pensé en Cloe.
Era una buena jugada sacar a Rosie en el tema por parte de Jade.
-Pensé que estabas segura de ser la próxima vencedora.
-Y lo estaba... Pero mis planes no salieron... como esperaba...
Cogí todo el aire que mis pulmones me permitían y miré a Jade a los ojos, con el cuchillo en su cuello.
-¿Una última petición?-Pregunté al borde de las lágrimas.
Ella sonrió, cerró los ojos y se inclinó hacia mi, posando sus labios sobre los míos. Cerré los ojos también y moví la mano rápidamente. Pronto un líquido espeso y caliente empezó a correr por mi mano. Sonó el cañón, y me aparté de Jade. Ahora no parecía tan bella como antes. Tenía los ojos cerrados, marcas de los Juegos, sangre por todas partes...
Entonces me percaté. Solo quedábamos dos.




Parte 2

¿Cuánto tardaría en encontrarme con el otro tributo? ¿Horas? ¿Minutos? ¿Segundos?
Sinceramente, no creía que pasase de esta noche.
¿Y que tributo sería mi contrincante?
Ahora estaba solo. Completamente solo. Y mi vida solo dependía de mis acciones. Cloe, Jade, Rosie, mis padres, mis amigos... todos confiaban en mi. Todos, menos yo. Tal vez pudiese con alguien como Paige, la chica del 3. Pero si era Flint el otro tributo, lo vía difícil. Muy difícil. Había visto como actuaba Flint. Prepotente, irónico, desagradable... actuaba antes de pensar y eso podría jugarle malas pasadas. Pero era fuerte, rápido y siniestro. Básicamente era como Blade pero algo más cuerdo y en versión masculina.
En esos momentos solo sentía un sentimiento: Culpabilidad. Por la muerte de Maxwell, por la de Blade, por no proteger a mi hermana, por matar a Jade. Aunque ella me lo pidiese, yo la había matado. Había matado a mi aliada. Había matado a mi mejor amiga.
Me había quedado con todas las armas de Jade, así que ahora tenía cuatro cuchillos, dos espadas, y un machete. Iba equipado.
"Se acabaron las trampas Blight. Ahora tendrás que hacerle frente a tus peores miedos."
Parecía que habían pasado años desde que entre a los Juegos. El día de la Cosecha estaba tan lejano ya... Y lo mucho que había cambiado en dos semanas.
Los rayos del sol se filtraban por las hojas de los árboles. Esta parte de la arena no había sido afectada por el agua, ya que estaba tal y como había estado el resto de días.
Caminé y caminé, hasta que de repente me di cuenta de a donde había llegado. Vi la cornucopia dorada y seguí su resplandor. No había vuelto a la cornucopia desde el primer día, y ahora, allí estaba.
Parecía que la habían elevado de nivel. recordaba que el agua me llegaba al cuello al estar cerca del cuerno dorado, y ahora que estaba tocando la superficie caliente del cuerno con la palma de mi dedo, el agua solo me llegaba a las rodillas. Parecía que todo el agua estaba al mismo nivel.
Un cuchillo se estrelló contra la pared dorada de la cornucopia. Obviamente había sido lanzado a posta a la pared, si Flint me hubiese querido dar, lo hubiese hecho. Lo que decía, prepotente. Prefería dar un buen espectáculo antes que matarme sencillamente. Tenía el presentimiento de que iba a sufrir.
-Vaya siete. Debo de decir que me has impresionado llegando tan lejos. Te aplaudiría, pero tengo que reservar mis energías. ¿Dónde está Jade? ¿Cómo la mataste? Se la veía tan segura de ser la ganadora...-Flint se río.- Inútil...
No le contesté. me sentía petrificado. Era Flint. Tenía que matar a Flint.
-¿Hola? ¿Estas bien?-Preguntó Flint.-Te lanzaría otro cuchillo para espabilarte, pero sería una muerte muy rápida ¿no? Muy... agradable. ¿Qué? ¿No me esperabas a mi? ¿A que no? Creías que tendrías que enfrentarte a alguno de esos pardillos del tres. Ellos tenían un plan, pero Marina y yo teníamos otro.
Apreté los puños al oír el nombre de Marina. Flint se dio cuenta.
-Ah claro... Marina mató a tu novia... Lo siento chaval. Bueno, pronto os reuniréis. Pero antes te contaré lo ocurrido... -Dijo mientras jugaba con un cuchillo.- A los del tres les habían enviado esos postes hace mucho tiempo los patrocinadores. Les encontramos, y nos los íbamos a cargar, pero nos dijeron que si les dejábamos vivir nos contarían su plan. Total, que nos dividimos y fuimos plantando esos postes por la arena. Eso hacíamos cuando nos encontramos con vosotros. Luego Marina murió, y yo tuve que hacer el resto. Hoy se avecinaba la tormenta tan esperada por los del 3, así que les dejé inconscientes, y yo huí. Cuando el rayo calló se supone que debería de haber ganado. Pero aún quedaban otros dos.
-Éramos Jade y yo.-Dije.
-Si bueno, me da igual Ahora solo quedas tu, y vas a morir.
Flint corrió hacia mi cuando ni siquiera había acabado de decir la frase. Giró su brazo y me dió con el codo en la cara, haciendo que cayese hacia atrás. Rodé por el agua, y él me pateó en las costillas. No podía levantarme, pero el me agarró del pelo y me arrastró hacia atrás para darme unas cuantas patadas en el estómago. Luego me tiró con fuerza al suelo.
Estaba mareado y confuso, pero tenía que responder si no quería morir. Todo esto había pasado como en un minuto. Lo único que sentía ahora mi cuerpo era dolor.
Me levanté y saqué una las espadas de Jade. Flint sacó las suyas.
-¿Qué piensas hacer con eso? Si ni siquiera la sujetas bien.-Me espetó el chico del 2.
Me apuntó con su espada, y con un movimiento rápido me corto en el brazo derecho, haciendo que soltase una de las espadas. Rápidamente me agaché a recogerla, pero Flint fue más rápido y la apartó de mi. Hizo otro movimiento rápido, pero yo supe responder. Los metales de las espadas chocaron. Una vez, dos veces, tres... Pero con otro movimiento hizo que me quedase sin espada de nuevo. Antés de que me diese tiempo a buscar más armas, llevo su brazo hacia atrás y lo bajo rápidamente. Intentando defenderme, atrapé la hoja de la espada entre mis manos. Flint, sonriendo maliciosamente, retiro la hoja de la espada con rapidez, haciendo que me cortase las manos que pronto se llenaron de sangre. Dolía inmensamente. Me ardían. Estaba seguro de que me había quedado sin manos, pero al mirar, comprobé que seguían estando ahí. Aunque estuviesen cubiertas de sangre goteante. Ahora no iba a ser capaz de coger nada más. Pero no quería morir.
Miré con odio a Flint. Era grande y rápido con las armas. ¿Pero y corriendo? ¿Era astuto? Le miré a él, y luego miré de soslayo la cornucopia.
"Los débiles no siempre están perdidos. Siempre hay esperanza." -Pensé.
Así que retrocedí un par de pasos hacia atrás, y huí. Mi cojera no me permitía correr adecuadamente, pero Flint no estaba muy preocupado por eso, ya que caminaba a un ritmo normal.
Yo rodeé la cornucopia y me subí encima de ella. Mientras esperaba a mi contrincante hize un esfuerzo y saqué el machete sujetándolo como podía. Me dolían tanto las manos. No miré mis manos durante mucho tiempo, pero vi como la piel cortada colgaba de ellas. Me escondí detrás del cuerno, y esperé a que subiese. Cuando lo hizo, salí de detrás del cuerno y me moví rápidamente en frente de el; de derecha a izquierda, (ignorando el dolor), y entonces hice una especie de giros con el machete. Se lo había visto hacer a Jade, y estaba seguro de que no se esperaría eso de mi. Cuando Flint estaba bastante desconcertado, levante el machete y le di con toda la  fuerza que tenía en la cara. Flint cayó hacia atrás, con la nariz sangrante. Cayó de la cornucopia de espaldas. Yo bajé de un salto y recordando el dolor que Blade me había provocado, le hice girar con una patada y cuando intento levantarse le pisé con fuerza en la espalda, luego le corte en la curva de la espalda. Sabía lo que dolía porque su compañera de distrito me lo había hecho.
Pero al contrario que Blade yo no quería perder el tiempo. Yo no sabía jugar bien a esto, así que sin pensármelo dos veces, cerré los ojos y hundí el machete en la espalda del chico. Al mismo tiempo, un dolor intenso me recorrió el cuerpo. Di dos o tres pasos hacia atrás y miré a Flint, que estaba gritando y agitándose. Se supone que eso debía de haber acabado con el, ¿no? Di unos pasos más hacia atrás y miré hacia abajo. Tenía un cuchillo clavado en el tobillo. Me senté en el suelo, y sin dejar de mirar a Flint, intenté sacármelo.
El chico estaba tumbado en el suelo, mirándome, respirando fuerte. Pero sonriendo.
-A ver quien consigue salir de aquí... antes... Ese... cuchillo tiene... veneno...-Tenía la respiración agitada, e intentaba desconsoladamente coger aire.
Miré la herida profunda que me había hecho.
-¿Qué?
Flint se río mientras escupía sangre.
Me levanté furioso. Esto tenía que acabar ya. Quería volver a casa. Me acerqué a Flint y le puse el pie en la espalda. El chico aulló de dolor. Hice que diese su cabeza hacia atrás y puse el cuchillo en su cuello, como había hecho con Jade.
-Hazlo rápido...-Pidió el chico. Y yo lo cumplí.
El cañón sonó. Y una voz invadió la arena.
-"Blight Oakheart, ganador de los 51 Juegos del Hambre."

No me lo creía.
Había ganado.

Miré al cielo. Un aerodeslizador venía a recogernos.
Pero entonces la vista se me emborronó, y noté que me caí al suelo aunque no viese nada. y el mundo me daba vueltas, y los ojos me temblaban. Sentía frío y calor al mismo tiempo y estaba temblando.
El veneno estaba empezando a hacer efecto.
Pero no podía. Había ganado. No podía morir ahora.
Mi tortura no había acabado aún. Tenía que seguir luchando, ya quedaba poco. Tenía que luchar por Jade, por Cloe, por Rosie...

5 comentarios:

  1. MaDRE mía, estoy alucinando! Tienes razón, esto bien valía para dos Capítulos. Uno con la muerte de Jade y otro con la batalla con Flint (que por cierto me ha sorprendido mucho que haya sobrevivido él, me esperaba uno de los del 3) . De todos modos, ha estado increíble, lo de Jade, ains, la voy a hechar mucho de menos. Ha sido horrible que Blight haya tenido que matarla así. Aunque mejor eso a que sufra por su herida. En cuanto a Flint, muy buena batalla, desde luego, te confieso que sentí que me robabas una idea con lo del veneno, tenía previsto meterlo en mi fic más adelante, aunque no así (tranquilo, no te plagiaré :P) . Pero igual me ha encantado, la batalla y luego ver al chico sonreír. Ha sido una idea excelente y más cuando Blight se ha desmayado al final, muy impactante. Bueno, ya sabemos que a Blight lo salva el Capitolio pero tengo curiosidad de ver como lo sufre y si le quedan secuelas. Sigue en cuanto puedas!

    PD: una anotación, se te ha olvidado la t de "tortura", has puesto "torura" xD. Pero por lo demás, todo bien :)

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    1. Holaa! Muchas gracias por avisar lo de la errata, lo solucionaré ahora. Ya sabes que a veces vas rápido y no te das cuenta de los fallos... jajaja. Me gusta que os haya sorprendido un poco, la verdad es que con lo de los tributos del 3 y Flint, esa era la idea, ya que todo lo de los postes y las conclusiones de Jade y Blight apuntaban a que uno del tres era el otro tributo pero... Flint era listo. Yo también echaré de menos a Jade, ha sido un personaje al que he acabado cogiendo cariño. Siiento lo del veneno :s jajaja pero se me ocurrio de repente y creí que sería buena trama. De verdad, muchísimas gracias por leer y ayudarme a continúar esta historia.

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    2. No te disculpes por eso, tenía una idea parecida y quise comentarlo pero como dije, me encanta tu giro, de verdad y no será igual así que tranquilo y sigue escribiendo. :)

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  2. Me voy de la vida. Literalmente me voy de la vida. Todo ha sido tan *-* La inundación, ver como se separaban y como Blight ha tenido que matar a Jade. Los pensamientos de Blight mientras caminaba y cuando se ha encontrado con él... Ha sido todo demasiado maravilloso. En cuanto a la pelea, madre mía, que pasada. Sobre todo me ha matado el "No me lo creía, había ganado"
    Creo que ya te lo he dicho alguna vez, pero si no pues mejor. Has conseguido hacer de Blight, un personaje más que secundario, un auténtico tributo y vencedor. Ahora pienso que el Blight que fué al vasallaje y murió fuera de escena se merecía algo más teniendo una historia (Ya sea la tuya o la de cualquiera) Y estoy seguro de que si Suzanne se hubiera leído esto, ella habría dado más importancia a Blight. Además, aquí todos sabíamos que Blight ganaba estos juegos pero tú has conseguido darle la emoción necesaria en los momentos justos. Te felicito Drew, has llegado muy lejos con este personaje y espero que no dejes de escribir sobre Blight tras esto.
    Muchas gracias por haber escrito esto, de verdad, de corazón. Porque se lo que cuesta y porque es duro compaginar el Blog con la vida pero tú lo haces.

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    1. Holaa! jajaja no te vayas que si no, no sabes como continúa esto ;) Me has emocionado con lo que has puesto y todo jajaja no sé, me pareció interesante este personaje cuando en En Llamas, Johanna habla sobre él. Al principio empecé con la historia de Johanna, porque me parece un personaje asombroso, pero Blight también es del 7 y se me ocurrió crear su propia historia, ya que no sabíamos nada sobre el. Me alegro de que ahora pienses en él como un verdadero tributo (y con todos los sufrimientos y líos que le he hecho pasar jajaja) Muchas gracias por leer y comentar, en serio, me animáis mucho a continúar.

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