Las puertas se abrieron dejándome ver nada mas que oscuridad. Todo estaba en silencio. Era medianoche.
No podía parar de imaginarme lo que sucedería si alguien me pillase aquí. ¿Algún otro tributo lo habría intentado antes? ¿O era el único tonto de toda la historia de los Juegos? En mi interior chocaban dos sentimientos opuestos. El primero, la curiosidad. El segundo, el miedo.
Me guié hacia las habitaciones por instinto. (Y deseando que los muebles tuviesen la misma disposición en todas las plantas.) Cuando llegue al hall de las habitaciones de los tributos, encendí una tenue luz. Abrí un poco la puerta de la derecha, conteniendo la respiración. Era la de Jade. Me meti dentro, y Jade me miro sorprendida. Yo la mire igual de sorprendido a ella. Tenia la cara cubierta de lagrimas, con el maquillaje de la noche esparcido por ello.
-¿Q-que haces aquí Blight?
-No podía quedarme con la curiosidad de lo que casi me dices en el ascensor.
Me acerque despacio, sentándome junto a ella en la cama. Ella me miro durante un rato, como si estuviese pensando que decirme.
-Da igual lo que pienses. Confía en mi. Mañana no nos esperes. Huye con Cloe. Tienes que decírselo. No confíes en nadie. Jasper y Blade, hablaron hoy. Piensan mataros. Creen que sois una amenaza demasiado grande. Tienes que irte. Si te ven... Vete Blight...
-Ya no hay alianza...-Era una afirmación por mi parte, no una pregunta.
-No, ya no... Vete.
-¿Por que me lo has dicho?
-Ya hemos hablado de esto...-Suspiro, y se limpio las lagrimas.-No le digas a nadie que tengo miedo.
-¿Tienes miedo?-Pregunte, y no recibí respuesta.
-¿Sabes Blight? A veces me pregunto como matar a los monstruos sin convertirte en uno de ellos. Porque si salgo, si salgo de la arena Blight, sere un monstruo. Lo seré. Llevo toda la vida entrenándome para esto. Para ser un...
La bese. Yo, la bese. Y al momento me sentí absolutamente culpable de todo, pero a la vez, me daba igual. Me daba igual porque sabia que no volvería a casa. Porque sabia que nunca mas estaría cerca de Rosie. Y eso es lo que mas me dolía. Que lo que mas parecido que tenia a los labios de Rosie eran los de Jade. Y en ese momento lo único que pensé fue en que Rosie debía de tener un futuro perfecto. La suerte se lo debía...
Me separe lentamente de Jade, y ella me abrazo. Sus cálidos brazos envolvieron mi cuerpo y tiraron de mi hacia abajo. Me tumbe a su lado, olvidándome de todo. En la oscuridad no estaba con Jade, estaba con Rosie. Y era penoso consolarme de esta forma.
-En realidad me fije en ti de verdad. Eres diferente al resto. Eres como a mi me hubiese gustado ser...-Me susurro al oído.
Empece a llorar, Jade me beso llorando. Y nos besamos con lagrimas en los ojos hasta quedarnos dormidos.
No se que hora seria cuando me desperté. Jade seguía durmiendo en calma. Me levante con sigilo y salí de su habitación. Camine despacio, intentando no hacer mucho ruido. Seguía todo oscuro, y de repente choque con algo. Casi caigo al suelo, pero ese algo me agarro. Se encendieron las luces y vi a Ben Monroe sujetando mi camiseta.
-¿Con que de visita a la habitación de mi hermanita, eh, siete?
-Eh... yo no, yo... No hemos hecho nada.
Ben no se parecía en nada a Jade. Media como dos metros, era musculoso, de mirada audaz, con rizos rubios y barba de tres días.
-Eso ya lo se...-Me dio un empujón tirándome al suelo.-No se que demonios hacen en la alianza del uno y el dos, pero si se que no duraras mucho en la arena. De hecho incluso es mi propia hermana la que te raja la garganta. Esta entrenada para eso, ¿Sabes? Por mucho que la hayas besado...
-¿Tu sabes...?
-Todo el mundo lo sabe... Andas detrás de ella. Muy bonito lo de cambiarla el nombre en las entrevistas, pero nada listo.
-Yo no estoy...
-Ben, déjale marcharse. Solo estábamos aclarando unas cosas para cuando suene el gong en los Juegos... -Jade estaba con los brazos cruzados sobre el pecho mirándonos, y hablando entre susurros. Ben me tendió una mano y me ayudo a incorporarme. Hizo un gesto con la cabeza, indicándome que saliese.
-Te veré en la arena Blight.-Se despidió Jade, y volvió a su cuarto. Yo me metí en el ascensor y pulse el botón de la planta siete. Me apoye en la pared del ascensor mientras este subía y suspire. Ya no había alianza. Quiza no volviese a ver a Jade mas, y tal vez fuese lo mejor. Debia de decirselo a Cloe. Iria ahora a su habitacion.
Cuando las puertas se abrieron, fui casi corriendo hasta su cuarto, pero no estaba. Estaba en el mio. No estaba contenta. Tenia el ceño fruncido.
-¿Donde estabas Blight?
-Cloe, tengo que contarte una cosa muy importante, así que no digas nada. He ido a ver a Jade y...
-¿QUE HAS IDO A...?-La tape la boca con la mano y me lleve el dedo indice a los labios para que se callase.
-Se acabo la alianza. Jade me ha dicho que Jasper y Blade piensan matarnos en cuanto tengan oportunidad. Se acabo. Iremos tu y yo solos. Nos iremos de la matanza sin acercarnos a la Cornucopia.
-¿Estas loco? No sobreviviremos sin armas...
-Tampoco si Jasper o Blade nos corta la garganta.-Replique.
-O Jade...No me mires así, pero no confió mucho en ella. Va en su manada Blight.
-Sea como sea, ahora estamos tu y yo solos. -Dije.
-¿Hermano y hermana?
Hermano y hermana.
No dormimos mas. Desayunamos temprano, todo lo que pudimos, y nos despedimos de Cressa.
-Chicos, se que uno de vosotros volverá. Lo presiento.
Nos llevaron en un aerodeslizador hacia donde la arena estaba. Nos pusieron unos chips en el antebrazo, el cual dolía mucho al insertarlo. No vi a Jade. En cambio en frente de mi estaba el "amistoso" Jasper, intentando hablar con Cloe y conmigo. La única palabra en la que podía pensar, era en la de traidor.
Lo mas duro, fue separarme de mi hermana. La abrace fuerte. Estos días habían sucedido muchas cosas. Y pensar que hace apenas una semana no sabia que tenia una hermana...
Camine junto a Atella por unos pasadizos subterráneos que estaban bajo la arena, hasta llegar a un diminuto cuarto. En el estaba la ropa que debía de llevar. Unos pantalones anchos marrones, una camiseta de manga corta negra, calcetines térmicos negros, botas de montaña y sudadera verdes, y una cazadora marrón y verde. Mi estilista me arreglo algo el pelo hacia un lado y me animo diciendo que estaba fantástico.
Me daba igual estar o no fantástico. Me temblaban las piernas, las manos, los brazos, los hombros, los labios... Mi cuerpo se sacudía descontroladamente. Me llevaba los dedos a la boca intentando morderme las uñas, las cuales ya tenia bastante cortas.
-60 segundos...-Advirtio una voz femenina.
Me levante de donde estaba sentado y camine hacia el elevador. Atella me detuvo antes abrazandome.
-Que la suerte este siempre de tu parte Blight.
-Gracias.-Hice un esfuerzo por sonreír y subí al elevador. Este se cerro, y comenzó a subir, y a subir, y a subir...
No hacia frío, tampoco calor. La luz del sol se reflejaba en el agua. ¿Agua? Pero también había arboles. Me fije mas en el paisaje, y lo reconocí. En el siete te los podías encontrar de vez en cuando. La arena era un pantano.
Mire a mi alrededor. A la derecha tenia a Connor, del Distrito 3, y a la izquierda a Jade. Ella no me miraba, estaba concentrada en la Cornucopia. Cloe estaba siete personas a mi derecha. Casi en el extremo. A su derecha tenia a Gregory, el chico del doce, y a su izquierda a Marina, la chica del Distrito 4. Ella también estaba atenta a la Cornucopia. No podía ir hacia allí. Me fije en la Cornucopia también, dorada y grande.
-Que empiecen los quincuagésimo primeros Juegos del Hambre.-Una voz masculina rugió por toda la arena.
Ambos capitulos son geniales! Y el giro que le has dado con el fin de la alianza está muy bien tambien(: Ahora tengo miedo de lo que Jasper les pueda hacer, y la arena promete, un pantano tiene muchas posibilidades! Sube pronto el capitulo Drew! Tengo muchísimas ganas de seguiiir leyendo:3
ResponderEliminarEl próximo capitulo espero subirlo este fin de semana. Le di muchas vueltas al tema de la alianza y al final decidí acabar con ella, aunque los Juegos no acaban aquí, y esta historia va a dar muchas vueltas. Espero que la sigas leyendo y que te siga gustando. Besos! :)
EliminarResumiendo, nos hemos quedado sin alianza en apenas unos segundos y si no fuera porque Blight subió a la habitación de Jade ni siquiera se habría enterado del plan de los profesionales, una alianza engañosa. Me he quedado de piedra con todo eso de la confesion de Jade, , ¿que pasará? ¿se encontrarán en la arena o se perderán para siempre? Me gusta la arena, un pantano, peligroso, oculto y misterioso.Quiero saber como sigue, ¡hasta pronto!
ResponderEliminarHolaa! La verdad es que al principio no estaba nada segura de si acabar con la alanza o no, pero al final decidí que romperla le daría mas juego a la historia. Tengo pensadas varias cosas interesantes que pasaran, y espero que el próximo capitulo este listo para este fin de semana. Gracias por leer y comentar! Besos!
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