12/31/2014
Johanna:Capítulo 49
Hola tributoooos. Siento mucho no haber escrito en tanto tiempo, y se que este capitulo es bastante cortooo, pero no he tenido mucho tiempo, y a parte, no se me han ocurrido muchas cosas, aunque algo importante pasara dentro de muy poquito. Bueno, espero que os guste tanto como otros capitulos, y muchas gracias por leer.
-A veces me pregunto por que sigo aquí. Me pregunto por que no morí en la arena como el resto. No era la mas hábil... No era la mas rápida... Nunca destaque por un comportamiento amenazador, o por un arma que dominase a la perfección. Era una mas... Y sorprendentemente sigo viva. Creo que tengo una deuda con el Distrito 4, una difícil de devolver, ya que no estaría aquí de no ser por mi aliado.-Miré la imagen de Cliff, con lagrimas amenazando en el borde de mis ojos por salir. -Cliff era mi aliado, y en unos días me enseño mucho mas de lo que quizá pueda aprender en mucho tiempo. Me enseño a no rendirme, a luchar por lo que quería, a que las cosas tenían solución por muy oscura que viese la vida... Con el aprendí que sin sufrimiento la alegría no seria tan deseada, y que la felicidad dejaría de ser un sentimiento a una simple palabra. Todos sufrimos en la arena, como nadie pueda imaginar. Solo los que hayan pasado por ello sabrán de lo que hablo...-Mire a Blight, y este me asintió.- Honestamente, la palabra felicidad puede ser una palabra cualquiera si de alguna manera hacen que el sufrimiento de los Juegos tan solo sea un mal sueño, si todos los tributos que estaban conmigo allí vuelvan... Los Juegos nos quitan a personas inocentes que no volveremos a ver. No volveremos a tocar, ni a hablar... No volveremos a ver como el viento ondea su pelo, o como suspiran de cansancio... Simplemente, no volverán. Lo único que tenemos para ellos son vagos recuerdos, que con el paso del tiempo, sus rostros empezaran a emborronarse y dudaremos del color de sus ojos... !Los Juegos nos quita personas inocentes! Hijos, hermanos, amigos... Y LA CULPA ES DEL CAPITOLIO. -Fue entonces cuando las cámaras se apagaron, pero ya me daba igual. - Ellos no tienen que pasar por esto cada año. No tienen que sufrir en cada cosecha por si sus hijos son seleccionados. No tienen que verles a través de una pantalla como mueren sin que ellos puedan hacer nada.
Blight me agarro por la cintura, tirando de mi hacia atrás mientras yo pataleaban.
-¡Cliff y Wood no tenían que estar muertos!-Grite, antes de que las puertas del Edificio de Justicia cerrasen. Entonces me derrumbe y empece a llorar.
Me sentía muy mal. Notaba una angustia muy grande en el pecho, y como si algo me taponase la garganta.
-¿Que has hecho Johanna?-Grito Blight. Su voz tenia enfado pero también contenía desesperacion.-No puedo creer que hayas dicho eso. No quiero saber que...¿Te das cuenta de que yo no puedo protegerte ahora? Y encima, para empeorar las cosas en cuatro días llegaremos al Capitolio.
-Me da igual...-Susurre, y luego me puse en pie para decirlo mas alto.-Me da igual. He soltado todo lo que sentía. Mis amigos no debían de estar muertos...
-Johanna...-Intento tranquilizarme Blight.
-Déjame Blight. ¿Acaso no recuerdas tus Juegos? ¿No perdiste a nadie importante?
Blight me miro con tristeza. Pase por delante de el, chocando mi hombro con el suyo, y salí por la puerta trasera del Edificio de Justicia. Allí me encontré con Finncik y Annie, abrazados, mirando a ninguna parte. Finnick me miro serio. Su acompañante ni siquiera se inmuto de que pasaba por su lado.
Deambule por zonas poco transitadas del Distrito hasta que la noche cayo sobre mi, y me vi obligada a volver a recoger mis cosas y reencontrarme con mi gente en la estación de tren. El próximo destino era el Distrito 3. En poco días llegaríamos al Capitolio, y me encontraría con Snow. Palpe mi chaqueta esperando encontrar el frasquito de veneno, y ahí estaba. Suspire aliviada. Pronto todo acabaría.
Antes de subir al tren, me sorprendió al volver a ver a Finnick Odair ablando con Blight, con Minerva Brightness revoloteando alrededor. Tropecé con uno de los escalones del tren, y los seis ojos se centraron sobre mi.
-Espero verte mejor en el Capitolio Johanna.-Finnick me dedico una pequeña sonrisa, y yo asentí. Sin decir nada mas entre en el tren.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Por fin! Lo ha soltado todo por esa boquita! Creo que Johanna va a perder a su familia ya antes de llegar a hacer lo que hará en el Capitolio, lo veo bien posible, aunque me encanta que sea tan descarada y sincera xD Me has pillado de improviso con el fin del discurso, yo en el climax de la emoción y de repente ¡La culpa es del Capitolio! No he gritado un sí en medio de la noche de milagro, ¡ Felices fiestas y hasta el siguiente Capítulo! <3
ResponderEliminarHolaa! Jajaja, Johanna ya esta empezando a cambiar y se da cuenta de lo que el Capitolio hace, y eso mas la pena por la perdida de sus amigos hace que la sinceridad se apodere de ella. Veremos a ver que la depara el Capitolio, y si se sale con la suya. Muchas gracias por leer y comentar! Y felices fiestas! Besos!
Eliminar